martes, 20 de marzo de 2012


Me cojés mientras duermo y me cojés a la mañana cuando me despierto, me cojés en la mente rápido y despacito, me cojés suavecito, y después, me lástimas, un poquito nada más, me maltratás, un poquito nada más, y enseguida otra vez nos morimos de amor mientras cojemos y cojemos desayunando, te doy el cafecito, mientras cojemos despacito? querés una tostada? qué le pongo a tu tostada? mejor seguimos cojiendo hasta el almuerzo y si querés te hago avioncito, si querés, te susurro en el oído bien bajito, que quiero que sigamos cojiendo, y que pase la merienda, que pase la cena, famélicas de tanto comernos, entramos en trance, delirio de sexo sucio que es REAL, en eso, somos las mejores, hay una sola palabra que dicha de tu boca me desnuca: ****. Está escrita, ahora podemos seguirnos cojiendo, todo el día,
acabando
cojiendo
desayunando...

2 comentarios:

  1. Estuve en esa y lo extraño tanto. Cojan mientras se tienen. Comanse.

    ResponderEliminar
  2. Hola,tus poesías me parecen muy interesantes.Me gusta
    Yo tambien tengo un blog de poesía.Te envio la dirección para que las leas y me comentes que te parecen:

    http://anna-historias.blogspot.com.es/

    Saludos

    Anna

    ResponderEliminar